Pongámonos en situación: tras pasar meses buscando, finalmente encuentras los zapatos de tacón de tus sueños, que combinan con todo tu fondo de armario y puedes usarlo tanto para el día a día como para salir de fiesta. Pero, al ponértelos, a pesar de que sean de tu talla (y una menos te aprieta) te bailan al caminar. ¿Te ha pasado? ¡Tranquila! Porque vamos a enseñarte 10 trucos para no se te salgan los zapatos de tacón al caminar
10 trucos fantásticos para caminar sin miedo con tus zapatos de tacón
Suele decirse que a grandes males grandes remedios. Los trucos que a continuación te vamos a enseñar son muy fáciles de aplicar. ¡Así podrás caminar sin miedo a que se te salgan los zapatos!
Plantillas especiales
Hay una solución bastante sencilla: utilizar unas plantillas. Estas pueden estar fabricadas de silicona, gel, cuero… materiales que no resbalan, y que se adapten, por supuesto, a tus necesidades específicas y el zapato que utilices.
Medias antideslizantes
“No puedo usar medias con tacones porque resbalan”, ¿te suena de algo esta frase? Seguro que en más de una ocasión lo has pensado. Pues bien, déjanos decirte que existen modelos de medias antideslizantes, que mejoran la fricción cuando caminas con tacones.
Modelos sin costuras en los pies, lo que te permitirá llevarlas con modelos abiertos sin que esto resulte antiestético. Además, cuentan con un refuerzo especial de gel o silicona en la planta, para mejorar la adherencia a la superficie del zapato.
Medias de red o rejilla
Aunque esto te limita bastante al tipo de vestimenta que vayas a utilizar, las medias de red o rejilla son perfectas para mejorar la adherencia del pie al a planta del zapato, ya que se mantiene cierto contacto entre la piel de nuestro pie y el zapato.
Sujeción adicional
Con los zapatos abiertos o de tiras no tendrás este problema, pero, ¿qué pasa con los que no tienen ninguna tira de sujeción? No pasa nada, puede añadirla llevándola al zapatero para mejorar la sujeción al pie con un cierre en el tobillo.
O, si lo quieres hacer por tu cuenta, lo puedes hacer fácilmente con una vieja pulsera, incluso con la tira de uno de tus zapatos viejos.
Laca de pelo
Igual estás pensando que nos hemos vuelto locos, pero este truco ya se utilizaba en los años 60. Es muy sencillo y barato; antes de ponerte los zapatos de tacón, rocíalos con laca y espera unos minutos para que se seque.
Al ponértelos y caminar, notarás como se adhieren a la perfección a tu pie y no se salen al caminar. Un truco que no solo vale para la planta, también puedes aplicarlo en la suela para mejorar la adherencia en determinadas superficies.
Limar la plantilla
Cuidado, porque este truco solo es para aquellas que son auténticas “manitas”. Consiste en limar la superficie de la plantilla, para así volverla más rugosa y, por ende, mejorar la adherencia con el pie. Otra opción es hacer pequeños arañazos con forma de cruz en la plantilla con un cuchillo.
Cinta adhesiva de doble cara
¿No tienes tiempo para aplicar alguno de los trucos anteriores? Este es perfecto para aquellas que tienen mucha prisa: utilizar cinta adhesiva de doble cara, esto es, las que pegan por las dos partes.
Solo debes cortar un trozo y pegarlo a lo largo de la planta del zapato, para mantener el pie en él. Eso si, es importante llevar medias, porque no es nada saludable para tus pies que entren en contacto directo con estas cintas.
Polvos de talco
En verano, el principal culpable de que el pie se salga del zapato es el sudor, debido a las altas temperaturas. Para estas fechas la solución es bien sencilla; utilizar polvos de talco, un absorbente natural con los que tus pies estarán bien secos.
Algodón en el talón
Antes que nada, debemos informarte que este truco no sirve para todos los tipos de zapatos de tacón, solo para los cerrados.
Consiste en poner un poco de algodón en el talón del zapato, para que se ajuste mejor en el pie. Podríamos decir que con esto estamos reduciendo la talla del calzado. Un truco rudimentario, y no el más cómodo del mundo, pero si querías una opción económica y rápida, es la mejor.
Salvamedias
Nuestro último truco puede que sea la solución perfecta para ti; salvamedias. Se trata de un protector que evita las rozaduras, pero también puede servir para mejorar la adherencia del pie al zapato.
Estas cuentan con una cara adhesiva para que el pie quede bien pegado al zapato, solo que no se pegan por la planta sino por el talón.
Algunos consejos extra para que no se te salgan los zapatos de tacón
Con los trucos que te hemos enseñado en el punto anterior ya no deberías tener problemas de que te salgan los zapatos al caminar, ¡y podrás disfrutarlos de ellos sin problemas! No obstante, déjanos darte algunos consejos extra:
Compra unos tacones de tu talla
Muchas veces vemos unos zapatos que nos entran por los ojos y no somos objetivas a la hora de comprarlo; da igual si nos baila un poco, si nos hace daño o provoca rozaduras en los pies. Lo que importa es que son bonitos y pegan con tu fondo de armario.
Aprende a ser más severa a la hora de elegir unos zapatos, comprando modelos que sean de tu talla y les vayan como un guante a tus pies. Esto te evitará muchos problemas en el futuro.
Lee opiniones por Internet
Es cierto que ningún pie es igual, pero no te vendría mal leer opiniones de otras personas que hayan comprado los zapatos que estás buscando. Nunca se sabe, es posible que encuentres alguien que tenga unas necesidades parecidas a las tuyas y descubras si ese par de tacones es para ti o no.
Acude a un profesional
Si tienes unos tacones que te encantan y quieres poder caminar con ellos sin miedo a que se salgan, ¿por qué no acudes a un zapatero profesional para que los ajuste? Eso sí, infórmate bien del precio, porque puede que al final te cueste más el arreglo que los zapatos.